Fraudes de tarjetas de crédito: Cómo identificarlos

Los fraudes de tarjetas de crédito son más comunes de lo que esperamos tanto si somos empresa como si somos un particular.

En España, en 2016, había más de 70 millones de tarjetas bancarias, de las cuales 50 eran de crédito y este número va aumentando cada año, por lo que a fecha de 2018 habrá aumentado entorno a un 6% más.

En 2016 se registraron 888.000 operaciones fraudulentas con tarjetas emitidas en España, por un importe en el entorno de los 56 millones de euros.

Los métodos fraudulentos cambian y a veces, son más sutiles gracias a la tecnología que está constantemente reinventándose y avanzando.

Internet, el teléfono móvil o Smartphone y el correo electrónico son los medios más utilizados a día de hoy.

El 69% de estas operaciones fraudulentas se comenten a través de estos canales, mientras que  sólo el 28% se realiza en TPVs (Terminal en Punto de Venta) y un 3% en cajeros automáticos, según la memoria sobre la vigilancia de los sistemas de pago del Banco de España.

Si eres un particular

Podemos ser estafados a través de nuestra tarjeta física o a través de medios de pago online.

En el caso de los fraudes físicos de tarjetas, podemos encontrar los duplicados en cajeros o el robo. Pero lo más común y sencillo es a través de medios online.

Uno de los métodos mas usados e imaginativos es a través del phishing, que consiste en hacerse pasar por una entidad bancaria o una empresa a través del correo o un SMS para pedirte datos a cambio de un vale regalo o con motivo de una comprobación de datos.

También plagian webs, “pharming”, de tiendas online que transitas para hacerte creer que estás en la original y así a la hora de realizar el pago obtener tus datos bancarios.

Por ello es esencial que compruebes que la página es segura  y cuenta con un sistema de comunicación de datos segura puedes observarlo en la url de la web “https: //”.

Además muchas webs donde es posible pagar con Visa y MasterCard cuentan con el sistema 3D-Secure donde antes de realizar el pago verifican la autenticidad del comprador, mandando una clave por SMS que será necesaria para finalizar la transacción.

Por suerte, los bancos hoy en día están atentos a todo tipo de movimientos inusuales por lo que si detectan operaciones fuera de lo normal o reciben información sobre alguna tienda o página online que haya sido vía de fraudes, suelen bloquear la operación o congelarla hasta estar seguros o ponerse en contacto con su cliente.

Consejos para evitar el fraude

• ¿Has recibido algún correo supuestamente de tu banco pidiéndote datos personales? Probablemente sea una estafa, ya que este tipo de entidades nunca usarán esta vía. En caso de duda, llama.
• ¿Vas a comprar en una web que no conocías anteriormente? Busca en internet reseñas.
• Comprueba que  la página web comience con «https://» .
• ¿La web no tiene una buena traducción? Puede que sea falsa, diseñada únicamente para robar datos financieros.
• Modifica tus claves de tu tarjeta y revisa tu saldo con frecuencia.
• Activa el servicio de alertas de tu banco, de esta forma recibirás un mensaje de texto cada vez que realices una operación.

Si eres una empresa

En el caos de que formes parte de un negocio y vendes productos o servicios online (ecommerce) y no cuentas con departamento de fraude debes estar atento a una serie de pautas para no ser estafado con sistemas de pago fraudulentos:

• Te han hecho un pedido que no se suele dar y demasiado bueno para creerlo: Si por ejemplo vendes ordenadores que suelen costar 1.000 euros la unidad donde por pedido suelen adquirir 1 o 2 y te encuentras con un pedido de 10 ordenadores, ponte en contacto primeramente con el comprador si desconoces quién es, ya que los pedidos grandes suelen ser para empresas donde se pacta un precio o algún tipo de descuento.

Los ciberdelincuentes solo tienen una oportunidad por lo que intentarán llevarse el máximo beneficio posible.

• Muchos pedidos de importes pequeños: Si una misma persona realiza varios pedidos seguidos de un importe que no sea sospechoso, desconfía. Las compañías dedicadas al ecommerce tienen un protocolo ante pedidos de alto importe por lo que si no prestan atención a pedidos de, por ejemplo, hasta 20€, esto puede ser muy suculento.
• Los estafadores suelen darse prisa en utilizar su tarjeta robada para obtener beneficio por lo que si un usuario es muy exigente y te propone un tipo de envío más rápido o distinto a lo que tú normalmente ofreces, algo anda mal. Cuanto más rápido expides el pedido, menos tiempo tienes para comprobar su legitimidad.
• Datos del comprador sospechosos: Si los datos del comprador son referentes a una empresa, intenta comprobar la existencia de la sociedad y de la persona que realiza el pedido, que es probable que tenga perfil en RRSS como LinkedIn.

Otra opción es confirmar el número de IVA Intracomunitario aquí.

• Una IP no está disponible: La dirección IP te permite identificar y localizar geográficamente a los usuarios.
• El comprador está en el extranjero: Existen ciertos países donde el número de fraudes es mayor, debemos informarnos de cuáles son para estar atentos a posibles pedidos internacionales. Además de que si en efecto se trata e un fraude al ser en otros países es más difícil ejercer acciones legales. Lo ideal sería tomarse el tiempo en comprobar la veracidad del pedido y de los datos.  

Si sospechas de que tu tarjeta ha sido duplicada o te han robado los datos, alerta al banco para anular las tarjetas.

También es necesario denunciar el robo de datos de la tarjeta ya que sin esa denuncia no podrás reclamar la cantidad sustraída, si se da el caso, al seguro o a la entidad.