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Los okupas son personas que se instalan, sin haberla comprado ni alquilado, en una vivienda ajena e inhabitada.

En el año 2016, tan solo en Madrid y Barcelona, fueron registrados más de un millar de okupas que se apropiaron de viviendas de otras personas.

La lentitud judicial hace que los propietarios tengan poco margen de actuación, a pesar de que la legislación vela por estos, los trámites y juicios para echar a un okupa, suelen llevar tiempo.

Si han ocupado tu casa lo que hay que hacer, de manera inmediata, es ir a la comisaría más cercana y poner la denuncia, después de este trámite pueden ocurrir dos casos, que la policía haga acto de presencia en la propiedad y que, con el permiso del propietario, entre en la vivienda y eche a los okupas, sería lo mejor que puede pasar, ya que se resolvería de manera inmediata.

En otro caso, los okupas pueden cambiar la cerradura de la propiedad, suele pasar muy a menudo, debido que estos inquilinos contratan a mafias para que les abran las puertas, les cambien la cerradura y les entreguen las llaves de la casa, esto es el peor caso porque conlleva una larga fase de trámites legales empezando por presentar la denuncia en el Juzgado de Guardia o la opción más recomendable llegados a este punto es interponer una demanda judicial por un delito de usurpación de su propiedad y esperar a que el juez emita una orden judicial de desalojo, para ello es sumamente necesario utilizar todos los medios posibles para identificar a los okupas, debido que cuando se cite para el juicio no suelen asistir, por ello es imprescindible identificarlos, a pesar de que no suelen esperar a que se produzca el desalojo, se suelen ir antes por su propia voluntad cuando saben que llegará el día.

El proceso completo suele durar en torno a un año, dependiendo del caso y del juzgado que lo lleve, además de que el propietario tiene que hacerse cargo de todos los gastos a pesar de que ganase el juicio, debido que si les tocase hacerse cargo a los inquilinos lo más probable es que se declarasen insolventes.

A pesar de que la gran mayoría de okupas, se establecen en viviendas vacías que no están siendo utilizadas por ningún propietario, hay algunos que han llegado a ocupar viviendas habituales de los particulares, esto está establecido como un allanamiento de morada y esta castigado con penas de hasta 2 años de prisión. En este supuesto la justicia va mucho más rápido e incluso la policía a llegado a entrar a la fuerza para desalojar a los inquilinos.

En abogados GESYS te ayudamos con todos los trámites para que todo se realice con la mayor brevedad posible, no dudes en ponerte en contacto con nosotros en el 91 202 83 28

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